"Para la libertad" de Miguel Hernández
Perdido en este mundo leo a Miguel Hernández, definitivamente resuenan los versos y nace una herida. Escucho a Serrat que se adentra en esta pesadilla de canción, tan vecina a nosotros y que tanto conmueve.
Serrat ejecuta los versos de dimensiones astronómicas. Impresionante poder.
Me imagino la vida de Miguel Hernández pasar, impasible ante la miseria y omnipresente en la lucha. Surgen entre estas notas la volcánica precisión de las palabras y la música. No puedo evitarlo. El fuego me prende el corazón.
Para la libertad sangro, lucho, pervivo.
Para la libertad, mis ojos y mis manos,
como un árbol carnal, generoso y cautivo,
doy a los cirujanos.
Para la libertad siento más corazones
que arenas en mi pecho: dan espumas mis venas,
y entro en los hospitales, y entro en los algodones
como en las azucenas.
Para la libertad me desprendo a balazos
de los que han revolcado su estatua por el lodo.
Y me desprendo a golpes de mis pies, de mis brazos,
de mi casa, de todo.
Porque donde unas cuencas vacías amanezcan,
ella pondrá dos piedras de futura mirada
y hará que nuevos brazos y nuevas piernas crezcan
en la carne talada.
Retoñarán aladas de savia sin otoño
reliquias de mi cuerpo que pierdo en cada herida.
Porque soy como el árbol talado, que retoño:
porque aún tengo la vida.
2 comentarios
Moebius -
Saludos
el rayo verde -